Morirás por hacerte abortos clandestinos. Trabajarás por menos dinero que los hombres. Serás condenada por prostitución mientras tus clientes se mantendrán en el anonimato. Serás golpeada y violada. Dejarás que te griten “piropos” por la calle aunque ello te moleste. Tendrás sexo cada vez que tu pareja lo desee. Serás madre o no serás... nada. Pero cada año, en tu día, recibirás una flor como premio por olvidar tu opresión. Niña obediente serás.
Sin embargo, como todo sistema, la sociedad patriarcal en algún punto falla. El 8 de marzo de 1908, 129 obreras textiles de la fábrica Cotton (de Nueva York) fueron quemadas vivas en un incendio provocado por su empleador por reclamar jornadas de 8 horas, descanso dominical e igual salario por igual trabajo. Así como las “brujas”, mujeres que decidieron luchar y preguntarse por su lugar en la sociedad, estas mujeres también murieron en la hoguera. Pero dejaron un camino marcado de lucha y desobediencia, de resistencia y cambio ante una sociedad que no hace mas que “reeducarlas” (“si querés ser una buena niña deberás…”) y si no puede, intentará invisibilizarlas o matarlas (¿cuáles son las hogueras del mundo contemporáneo?) Pero aún así hay mujeres que eligen desobedecer.
Podrás elegir preguntarte por tu propio cuerpo; podrás elegir preguntarte por tu sueldo en relación al de los hombres; podrás elegir preguntarte por tu lugar en la política; podrás elegir preguntarte por la importancia de tu voz; podrás elegir preguntarte por cómo sos representada en los medios; podrás elegir preguntarte por la condena a tus compañeras que ejercen la prostitución; podrás elegir preguntarte por qué ante una denuncia de violación escuchás los murmullos de "por algo habrá sido". Podrás preguntar, cuestionar y luchar. Niña desobediente, mujer pública y luchadora habrás elegido ser.
Sin embargo, como todo sistema, la sociedad patriarcal en algún punto falla. El 8 de marzo de 1908, 129 obreras textiles de la fábrica Cotton (de Nueva York) fueron quemadas vivas en un incendio provocado por su empleador por reclamar jornadas de 8 horas, descanso dominical e igual salario por igual trabajo. Así como las “brujas”, mujeres que decidieron luchar y preguntarse por su lugar en la sociedad, estas mujeres también murieron en la hoguera. Pero dejaron un camino marcado de lucha y desobediencia, de resistencia y cambio ante una sociedad que no hace mas que “reeducarlas” (“si querés ser una buena niña deberás…”) y si no puede, intentará invisibilizarlas o matarlas (¿cuáles son las hogueras del mundo contemporáneo?) Pero aún así hay mujeres que eligen desobedecer.
Podrás elegir preguntarte por tu propio cuerpo; podrás elegir preguntarte por tu sueldo en relación al de los hombres; podrás elegir preguntarte por tu lugar en la política; podrás elegir preguntarte por la importancia de tu voz; podrás elegir preguntarte por cómo sos representada en los medios; podrás elegir preguntarte por la condena a tus compañeras que ejercen la prostitución; podrás elegir preguntarte por qué ante una denuncia de violación escuchás los murmullos de "por algo habrá sido". Podrás preguntar, cuestionar y luchar. Niña desobediente, mujer pública y luchadora habrás elegido ser.