ACTUALIDAD DEL CORDOBAZO Y
UN CAMINO PARA
Los
efemérides siempre convocan a la memoria, pero del mismo modo que sucede con
fechas como el 24 de Marzo, el 29 de Mayo no debería ser solo una ocasión para
recordar, sino una oportunidad para explorar en nuestra historia las causas que
dieron origen a esa gigantesca pueblada obrera, estudiantil y popular luego
denominada “Cordobazo” y pasar en limpio las enseñanzas que nos deja.
Y más aún
en un momento como el actual, cuando la política K (que profundizó la crisis
estructural y la dependencia de nuestro país) descarga la crisis económica
internacional sobre la clase obrera y los sectores populares, poniendo sobre la
mesa nuevamente la necesidad de una salida obrera y popular, y el debate sobre
el camino para lograrla.
El 29 de
Mayo de 1969 se levantaron las masas obreras y populares de la ciudad de
Córdoba contra las medidas de ajuste de
No
pretendemos hacer en esta nota una descripción de los hechos del Cordobazo,
mucho se ha dicho y escrito sobre eso. Solo queremos marcar algunas cuestiones
fundamentales que alumbran el significado que tuvo la pueblada y las enseñanzas
que dejó, enseñanzas que se vinculan con la situación actual de la clase
obrera, los estudiantes y el conjunto del pueblo de nuestro país.
El papel dirigente del movimiento obrero
El núcleo
fundamental del Cordobazo fue la clase obrera, particularmente la concentrada
en las grandes empresas como las automotrices. Los cuerpos de delegados, las
comisiones internas y las organizaciones gremiales fueron las herramientas de
organización de los trabajadores.
Las bases
obreras desbordaron a sus dirigentes sindicales, muchos de los cuales jugaban a
un recambio dentro de
La levadura
del estallido fue el clasismo obrero, que había comenzado a organizarse como
una nueva corriente sindical y política revolucionaria, y una amplísima y
heterogénea izquierda, peronista, radical, socialista, cristiana, comunista: los
delegados clasistas de la matricería Perdriel del SMATA, Agustín Tosco de Luz y
Fuerza, los sectores del peronismo combativo nucleados en
Luego del
Cordobazo la corriente clasista del proletariado cordobés cobró mucha fuerza,
enfrentando la traición de los jerarcas sindicales y fomentando una verdadera
democracia obrera. Fueron recuperados por el clasismo los sindicatos SITRAC y
SITRAM de Fiat, y en 1972 el clasismo revolucionario encabezó
En estos
últimos años importantes luchas obreras vienen golpeando la política
kirchnerista de bajos salarios, trabajo en negro y flexibilización laboral. Ha
ido emergiendo una nueva camada de delegados y activistas combativos y
clasistas, en gran medida jóvenes. Ejemplos de esto son las luchas de los
petroleros, de Terrabusi, del Casino, Maffisa, el Astillero Río Santiago, de
las fábricas recuperadas, del INDEC, el Hospital Francés, los docentes. Estas
luchas han ido chocando a su vez con dirigentes sindicales sirvientes del
Estado y las patronales, y en muchos casos han ido desbordándolos. Ahora, en el
marco de la crisis, frente a los despidos y suspensiones han empezado a
estallar luchas obreras: General Motors, Paraná Metal, Indugraf, Massuh, etc. Al
mismo tiempo, los jerarcas sindicales como Moyano siguen atados al Gobierno kirchnerista,
haciendo negociados y exigiendo puestos en las listas para las elecciones.
Hoy, como en los 70, para avanzar en un camino revolucionario hacia la liberación nacional y social sigue siendo una condición necesaria el cambio de la correlación de fuerzas en el movimiento obrero, la recuperación por parte del clasismo antiimperialista y revolucionario de los cuerpos de delegados, comisiones internas y sindicatos. Solo si la clase obrera se pone al frente es posible unificar a todos los sectores populares que es necesario unir para imponer esta salida. Esto empieza a darse en algunas multisectoriales del interior del país. Los estudiantes tenemos que apoyar las luchas obreras y confluir desde nuestras propias reivindicaciones.
Las contradicciones por arriba y la acción
independiente de la clase obrera y el pueblo
Otro
elemento que es necesario analizar para entender el Cordobazo tiene que ver con
las contradicciones en el seno de las clases dominantes, que, en un país
dependiente como el nuestro, expresan la disputa entre distintos imperialismos.
Onganía representaba a sectores pro-yanquis y dentro de las Fuerzas Armadas el
principal núcleo que le disputaba el poder era el encabezado por Alejandro
Lanusse, que representaba a sectores de terratenientes y burgueses
intermediarios ligados a los europeos y a esa nueva superpotencia que
era
Este sector
quiso instrumentar la jornada del 29 de Mayo para debilitar a Onganía e imponer
un recambio, pero las masas obreras y populares de Córdoba se salieron de ese
libreto. Al tomar el paro activo en sus manos, desbordando a los dirigentes
sindicales, la dirección de la lucha quedó a cargo de miles de delegados y activistas
que no se disciplinaban ni estaban atados a las fuerzas en pugna en las
alturas. De este modo, las fuerzas obreras y populares aprovecharon las
contradicciones por arriba para avanzar en una acción independiente, en vez de
ser utilizadas en esa disputa.
Hoy se agudizan también las contradicciones en el bloque de las clases dominantes. El “modelo K” hace agua y ya no le garantiza una tajada a todos los sectores del bloque dominante. El kirchnerismo continúa debilitándose.
El Gobierno
pretende profundizar su modelo de bajos salarios, el bajo presupuesto de salud
y educación, los subsidios a las empresas amigas, la concentración y
extranjerización de la tierra, los tarifazos, etc. Otros sectores de las clases
dominantes buscan un recambio, y agitan devaluaciones, vueltas al FMI… Todos se
juegan con todo a las elecciones.
Por eso, en
medio de las disputas entre las clases dominantes, la clase obrera y los
sectores populares tenemos que ser capaces de actuar con independencia,
empujando la lucha a fondo con un programa que permita reagrupar y unir a todos
los sectores populares opositores a la política K, y aprovechando las
contradicciones entre los de arriba.
El papel del movimiento estudiantil
El peso del
estudiantado en Córdoba era muy grande, no solo porque eran alrededor de 30.000
en esa época, sino por su tradición política desde
1969 fue un
año plagado de luchas estudiantiles en todo el país. Estalló la lucha contra el
aumento del ticket del comedor universitario en Corrientes, donde fue asesinado
el estudiante Juan José Cabral, conmoviendo al país.
En Córdoba
el estudiantado universitario se había ido acercando a la clase obrera, en
particular hacia la figura de Agustín Tosco. Dos días antes del Cordobazo se
realiza en
En los
últimos años los estudiantes universitarios venimos enfrentando la política del
Gobierno K, que asfixia presupuestariamente a
El año
pasado en
A los
estudiantes, como a la clase obrera y el conjunto del pueblo, la crisis nos
golpea fuerte. Es una necesidad desatar la lucha estudiantil por nuestras
necesidades, y a la vez ir confluyendo con la clase obrera y los sectores
populares para imponer una salida.
Los debates sobre el camino
En la época
del Cordobazo había un importante debate sobre el camino que debía recorrer la
clase obrera y el pueblo frente a
Algunos
decían que había que apoyar a un sector de las fuerzas armadas “peruanista” (en
referencia a Velazco Alvarado de Perú), pero identificaban como cabeza de la
corriente “peruanista” en
Hoy también
está abierto un debate sobre el camino: principalmente tiene que ver con la vía
electoral o el camino del Argentinazo. ¿Es posible conseguir los cambios que
necesitamos mediante estas elecciones? ¿Qué le faltó al Argentinazo del 2001?
El conjunto
de las clases dominantes se juegan a las elecciones, que entre el
adelantamiento de la fecha y las “candidaturas testimoniales” se han
transformado en las más truchas de los últimos años. Intentan así dividir a los
que luchan, sembrar esperanzas y legitimar las instituciones y encausar por esa
vía la lucha obrera y popular. Muchos, equivocados, entran en ese juego. Probablemente
una vez más la posición que exprese con contundencia y masividad la oposición
popular al kirchnerismo van a ser los millones de votos en blanco, nulos
y la gente que no va votar, el llamado "voto bronca”. No va a haber salida en ese terreno para los
sectores populares.
El Cordobazo
y el Argentinazo mostraron que solo el pueblo en las calles tiene la fuerza
para enfrentar los planes de ajuste de las clases dominantes. Pero además el
problema planteado es cómo lograr no solo echar a un Gobierno sino imponer otro
que resuelva de una vez por todas las necesidades de la clase obrera y el
pueblo. Por eso la tarea planteada ahora es reagrupar a los sectores y fuerzas
obreras y populares, democráticas y antiimperialistas, haciendo confluir las
luchas, en el camino del Cordobazo y el Argentinazo, para avanzar hacia la
revolución de liberación nacional y social.
Rodolfo